Por Alexander Grosman
Cabo San Lucas es conocido por sus muchas opciones de Golf
Por qué escogí Cabo San Lucas como mi hogar? …
Por la política general del Ayuntamiento o quizás por su misma fisonomía, Los Cabos está protegido del turismo salvaje, limitado solo a “playa y sol”, que no tiene ningún interés particular en el país ni en su cultura; el turismo se limita a sí mismo sin crear un puente vivo entre los lugareños y los visitantes.
Sin embargo, la principal cualidad de Los Cabos radica en el hecho de que cautiva a las personas, convirtiendo a los visitantes efímeros en residentes permanentes. Mi caso es un buen ejemplo.
El centro es pequeño pero auténticamente mágico y vibrante. Obviamente, no se parece a ningún otro destino turístico como Cancún, Acapulco o Vallarta. Los Cabos cuenta con varios lujosos hoteles con campos de golf y todas las otras opciones de confort y disfrute para sus visitantes.
Por ejemplo, hay un pequeño y poderoso complejo llamado “Puerto Paraíso“, construido por la empresa de Sergio P. Adler, un brillante arquitecto, donde todo está compuesto por columnas y pisos hechos de magnífico granito importado de todo el mundo. Contiene tiendas, bares y servicios excesivamente lujosos. Tampoco hay límites en cuanto a lugares para comer, con el único y exclusivo Restaurante Israelí, Casa Shalom, de cocina mediterránea, amenizada por música y bailes orientales, un lugar que se ha convertido en una plataforma para encuentros multicolores. Del mismo modo Nikki Beach con su bar flotante en la piscina, donde los huéspedes con su bebida favorita descansan en colchones de aire flotantes meciéndose suavemente en el agua, encontrando un regocijo y relajación tan buscados.
Marina de Cabo San Lucas
Aparte del glamour, también puedes encontrar una calidad de vida extraordinaria dentro de un perfil modesto. Las apariencias engañan… piénsese por ejemplo en Blue Fish Sushi manejado con superior maestría por mi amigo Guillermo Reyes, que ha vivido en Japón, donde aprendió secretos normalmente reservados solo para japoneses o hablantes de japonés. Sus platos son fusión y únicos. Gracias a sus excelentes relaciones con sus amigos pescadores y a su conciencia profesional, siempre sirve comida fresca, mientras que algunos de los grandes hoteles de playa solo sirven pescado de colores importado y congelado … ¡Qué paradoja! Los residentes lo saben y hacen cola para una mesa en Blue Fish Sushi, que también se especializa en catering.
Entonces, en general, prevalece la sensación de que el lugar selecciona a quienes desean adoptarlo de una manera real y honesta. Para mí, Cabo San Lucas evoca imágenes de Portofino, una ciudad portuaria italiana verdaderamente encantadora. El Centro de Artes que me interesa no solo personalmente, sino sobre todo profesionalmente, se encuentra en el Mercado de
San José del Cabo. Es un mercado que ha surgido con su enfoque más en los residentes locales que en los turistas en busca de un toque de “arte” que creo que es uno de los detalles que constituyen los activos más valiosos de Los Cabos. Otra concentración de gran actividad cultural se puede encontrar en Todos Los Santos.
Permítanme señalar que hay otros lugares interesantes a lo largo del camino entre Cabo San Lucas y Todos Santos. Esta es La Baja por excelencia, una tierra virgen, con algunas construcciones tímidas, una tierra de especulación para inversionistas a largo plazo, pero en la actualidad un refugio para el turismo alternativo e improvisado donde los artistas están anunciando “Art & Beer” con signos primitivos.
Los Arcos, Cabo San Lucas
Es aquí donde surfistas y hippies, así como amantes de la naturaleza, los espacios abiertos, el desierto y las motos, tienen sus encuentros y celebraciones.
Deja tu comentario